Silencio

Silencio. Al principio sólo el silencio existía. La ausencia de actividad, es decir, la quietud, era la actividad predominante. Después, le siguió el movimiento furtivo, su velovidad tan imperceptible que era casi despreciable, pero perduró, y pronto en líneas paralelas se desarrollaron sus hermanos mas rápidos.

Quietud no es lo mismo que estancamiento. El estancamiento es contrario a la vida. Cualquier ser vivo puede estar quieto, pero cuando se estanca, se extingue.

El estancamiento es la ausencia de fuerza, de desición, de cambio. La quietud no impide el flujo de la vida. En la quietud del silencio, de la paciencia, de la contemplación, podemos captar sutilezas que de otro modo escaparían a nuestra atención.

Es en las ciudades, con el ruido de la productividad y las prisas del cotidiano trajín donde la humanidad olvida la importancia del reposo y la herramienta del silencio para la concentración, la meditación y la paz.